Month: Abril de 2020

Confiança

Marc Vicens, 2020.

Abrió uno de ellos y sacó de un esterilizador dos máscaras de gasa, dio una a Rambert para que se tapara con ella. Rambert le preguntó si aquello servía para algo y Tarrou respondió que no, pero que inspiraba confianza a los demás.

Albert Camus, La peste, traducció de Rosa Chacel, Editorial Planeta DeAgostini, 2005.

Adaptar-se

Marc Vicens, 2020.

Nuestros conciudadanos se habían puesto al compás de la peste, se habían adaptado, como se dice, porque no había medio de hacer otra cosa. Todavía tenían la actitud que se tiene ante la desgracia o el sufrimiento, pero ya no eran para ellos punzantes.

Albert Camus, La peste, traducció de Rosa Chacel, Editorial Planeta DeAgostini, 2005.

Enterraments

Marc Vicens, 2020.

Pues evidentemente hay que hablar de los entierros, y el cronista pide perdón por ello. Bien sabe el reproche que podrán hacerle a este respecto, pero su única justificación es que hubo entierros durante todo este tiempo y que en cierto modo se vio obligado, como se vieron todos nuestros conciudadanos, a ocuparse de los entierros. No es en absoluto aficionado a ese género de ceremonias; prefiere, por el contrario, la sociedad de los vivos y, por ejemplo, los baños de mar. Pero los baños de mar habían sido suprimidos y la sociedad de los vivos temía constantemente tener que dejar paso a la sociedad de los muertos.

Albert Camus, La peste, traducció de Rosa Chacel, Editorial Planeta DeAgostini, 2005.

Hi ha matins i matins

Hi ha matins…

De sobte, hi ha matins que só vellet

i bufo dolçament les volves del vestit,

i poso belles comes si faig algun sonet

i saludo el passant amb un braç encongit.

Tinc un gran cansament del que he vist i sentit

i tot pensant en l’íntim, inútil minyonet,

vibra el meu cor mig còmic i mig endolorit

com en el capaltard el so d’un clarinet.

En els meus dits balders, les coses són adverses;

i m’atabala arreu el so de les converses;

sé, engabiat com un canari, el meu destí.

El món se m’ha tornat una grisa aquarel·la 

i faig al vidre del rellotge fregatel·la

amb la malencolia de viure perquè sí.

Josep Carner, Hi ha matins… Els millors poemes, Edicions Proa, 1998.

Dibuixos: Marc Vicens, 2020.

Indispensables

Marc Vicens, 2020. Tinta xinesa sobre paper (fragment).

Se tuvo la idea de aislar, en el interior mismo de la ciudad, ciertos barrios particularmente castigados y de no dejar salir de ellos más que a los hombres cuyos servicios eran indispensables. Los que hasta entonces habían vivido en esos barrios no pudieron menos de considerar esta medida como una burla, dirigida especialmente contra ellos, y por contraste consideraban hombres libres a los habitantes de los otros barrios.

Albert Camus, La peste, traducció de Rosa Chacel, Editorial Planeta DeAgostini, 2005.